Austria es un lugar de pintoresco encanto alpino y ricas oportunidades para las artes y la cultura. Su capital, Viena, atrae a multitudes de visitantes de todo el mundo por su arquitectura grandiosa y su atmósfera empapada de música.
Su Ringstrasse alberga algunos de los edificios más grandiosos, una visita obligada si estás en la ciudad. Dé un paseo en tranvía para ver la Ópera Estatal, el Parlamento y más.
1. Palacio de Schonbrunn
Hay pocos lugares en Europa que puedan rivalizar con el opulento esplendor barroco del Palacio de Schonbrunn. Una visita obligada para cualquier viajero, este gran palacio ofrece una visión única de la rica historia de Austria.
Este enorme palacio y sus jardines alguna vez sirvieron como residencia de verano de los Habsburgo. Su amplio parque y cuidados jardines, así como sus muchos artefactos interesantes, son un espectáculo digno de contemplar.
También puede participar en una variedad de recorridos históricos, que le enseñarán todo sobre esta estructura icónica y su papel en la historia. Como alternativa, puede reservar una visita autoguiada y explorar a su propio ritmo.
Si es un fanático de la música, el Palacio de Schonbrunn organiza conciertos regulares todos los días durante los meses de invierno y primavera (del 2 de abril al 19). Los conciertos cuentan con música clásica de la orquesta del Palacio de Schoenbrunn, así como de músicos internacionales.
2. Montaña Schafberg
Si desea obtener unas vistas de 360 grados de los lagos alpinos vírgenes y las montañas austriacas, entonces Montaña Schafberg es el lugar para ir. También es un gran lugar para hacer caminatas y experimentar algunos de los paisajes más hermosos del país.
Cuando la moda turística llegó a Europa en el siglo XIX, los pueblos y ciudades alrededor del lago Wolfgang asumieron un papel de liderazgo en el desarrollo el “Sommerfrische” o vacaciones de verano. Originalmente, los clientes accedían al Schafbergspitze en diligencia y dependían de los servicios de "portadores de literas".
El tren de cremallera, que comenzó a funcionar en 1892, sigue siendo la forma más popular de llegar a la cumbre en la actualidad. El viaje dura alrededor de 35 minutos y es una forma perfecta de disfrutar de todo el impresionante paisaje.
3. Castillo de Hohenwerfen
Ubicado en el valle de Salzach, a 40 km al sur de Salzburgo, el castillo de Hohenwerfen se alza sobre la ciudad de Werfen. Está flanqueado por los Alpes Berchtesgadenskie y la cadena montañosa Tennengebirge, lo que proporciona un telón de fondo espectacular a este impresionante castillo medieval de roca.
El castillo fue construido como un bastión defensivo, con su gran altura que le permitía ser utilizado para operaciones militares. Más tarde se transformó en residencia y retiro de caza.
Hoy en día, el castillo cuenta con una amplia gama de atracciones que atraen a todos los visitantes. Hay visitas guiadas, una elegante taberna del castillo y la Tienda de los Caballeros. También está el primer Museo Austriaco de Cetrería, una ruta temática de aves rapaces y espectáculos de cetrería que son muy populares entre los visitantes.
4. Cuevas de hielo de Dachstein
Las gigantescas Cuevas de hielo de Dachstein son una atracción imperdible cuando se visita la ciudad austriaca de Hallstatt. El área es un gran destino para practicar senderismo, escalada y espeleología.
Las formaciones de hielo en la cueva son creadas por el agua que se filtra desde la meseta de Dachstein a través de pequeñas grietas. Cuando está afuera las temperaturas están por encima del punto de congelación, pero las cuevas todavía están llenas de aire extremadamente frío, el agua que penetra se congela para crear deslumbrantes formas de hielo.
Una visita guiada a la cueva de hielo es la mejor manera de explorar las maravillas naturales. Guías expertos te informarán sobre la historia completa de las cuevas y te brindarán datos interesantes sobre cómo se formaron. También aprenderá sobre las estalactitas y estalagmitas que se forman dentro de las cuevas de hielo durante millones de años.
5. Hallstatt
Hallstatt es una de las ciudades más fotografiadas de Europa y es un destino popular para los viajeros. Está rodeado por el hermoso lago Hallstatt y las montañas de Dachstein, que forman parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
El centro de la ciudad tiene una plaza central donde puedes disfrutar de una taza de café. acércate y explora las tiendas y cafés locales. También puedes hacer un recorrido en bote por el lago o alquilar un bote de remos para explorar las aguas cristalinas.
El pueblo alberga una catacumba y un cementerio, así como una iglesia católica. Hay más de 600 calaveras pintadas en la catacumba y si visitas la iglesia, tendrás la posibilidad de ver un osario muy inusual llamado Charnel House.